Por primera vez en la historia del colegio, alumnas mujeres fueron bautizadas en el Gymnasium. La celebración se dio ayer por la noche dentro y fuera del establecimiento. Entre otras cosas, los chicos juraron por su fallecido ex compañero, Matías Ignacio Albornoz Piccinetti.

Tras 70 años de existencia, la institución dependiente de la Universidad Nacional de Tucumán (UNT), incorporó a seis mujeres a su alumnado este 2018. Las mismas fueron bautizadas ayer por la noche -igual que sus compañeros varones-, con el rito clásico a cargo de los estudiantes. En el mismo, los más grandes dan la bienvenida a los nuevos ingresantes.

"Quién diría que tan rápido pasaríamos de ser bautizados a bautizantes; de los más chicos a los más grandes", empezaron diciendo los alumnos mayores. Además de los puntos por los que suelen jurar año a año, esta vez se agregó a ellos una figura muy especial: la de su ex compañero Matías Ignacio Albornoz Piccinetti. 

"¿Juráis comenzar el espíritu gymnasista en todas las promociones venideras?; ¿juráis aprender de todos los errores cometidos por generaciones anteriores para mejorar cada aspecto de este hermoso colegio?; ¿juráis practicar la autodisciplina de manera justa y responsable?; ¿juráis luchar para mantener vivo el espíritu gymnasista pase lo que pase?; ¿juráis defender todos y cada uno de los valores que te brinda el Gymnasium hoy y siempre y disfrutar cada momento como si fuese el último?; ¿juráis defender los colores azul y rojo, mostrándolos con honor en cualquier lugar del mundo?; ¿juráis hacer de cada uno de tus compañeros un hermano para que la promoción 2018-2025 sea la más unida?; ¿juráis tener siempre presente la autocrítica para aprender de nuestros errores y crecer como personas libres?; ¿juráis siempre tener presente la memoria de nuestro hermano gymnasista Matías Albornoz Piccinetti para mantener eterno su legado?; ¿juráis no olvidar jamás a la promoción 2011-2018 como el curso que los recibió en el Gymnasium?".

Una vez terminado el discurso, los futuros egresados se abrazaron y rompieron en llanto. 

Cada vez son menos los colegios con educación diferenciada para varones o mujeres. La admisión de mujeres en el Gymnasium se dio luego de un debate entre los alumnos y las autoridades del colegio. La institución abrió la inscripción para 70 niños (por falta de espacio no puede albergar a más alumnos). Se inscribieron 12 chicas, y de ellas seis lograron aprobar el examen. Por única vez fueron ubicadas tres en una división y tres, en otra.